Estudiantes de Abogacía realizaron simulacros de audiencias en el Polo Judicial Penal de Mendoza

Alumnos de quinto año de la Universidad de Congreso llevaron adelante simulacros de prisión preventiva, juicio abreviado y suspensión de juicio a prueba.

Por primera vez, estudiantes de la carrera de Abogacía de la Universidad de Congreso llevaron a cabo audiencias simuladas dentro del Polo Judicial Penal de Mendoza. La iniciativa se desarrolló en el marco de la Cátedra de Práctica Profesional Supervisada de la Facultad de Ciencias Jurídicas. En la cátedra se articulan instancias de formación práctica con el funcionamiento institucional.

En esta oportunidad, los estudiantes del último año llevaron adelante procedimientos habituales del proceso penal, entre los que se contaron audiencias de prisión preventiva, juicios abreviados y suspensiones de juicio a prueba. Estas prácticas permitieron que los alumnos apliquen los conocimientos teóricos adquiridos durante el cursado en el mismo entorno donde deberán desempeñarse durante el ejercicio de su profesión. Al mismo tiempo, fortalecen sus habilidades de litigación oral.

La actividad fue coordinada por el titular de la cátedra, Dr. Mauricio Colotto, y la profesora adjunta y coordinadora del área penal, Dra. Gabriela Perrotta, junto a la Responsable de Gestión y Logística del Polo Judicial, Lic. Natalia Morado. La presencia de docentes y autoridades garantizó que las simulaciones se desarrollasen con rigurosidad procesal y respeto por las formalidades que establece la normativa.

Durante la jornada, los futuros letrados pudieron practicar la presentación de argumentos, la formulación de pedidos procesales y la actuación en audiencias orales, instrumentos centrales del sistema acusatorio. Estas instancias prácticas son clave para consolidar destrezas de oratoria, estrategia y trabajo en equipo en situaciones de presión profesional.

La experiencia se inscribe en un circuito de cooperación entre las Casas de Altos Estudios y la justicia que promueve la vinculación académica con la práctica institucional. Ese vínculo facilita que la formación universitaria incorpore protocolos, normas y dinámicas propias del ámbito judicial, contribuyendo a una transición más eficiente hacia el ejercicio de la profesión.

Este tipo de prácticas refuerzan la importancia de la formación y capacitación en destrezas para la litigación dentro del sistema adversarial. La combinación de teoría y simulación en espacios reales no solo mejora la competencia técnica de los futuros abogados, sino que también promueve una cultura de responsabilidad y respeto por los procedimientos que sostienen el servicio de justicia.