Una enfermedad profesional es una dolencia, causada en el tiempo, por factores presentes en el lugar o tipo de trabajo. Todas ellas están encuadradas en un listado especial que se actualiza constantemente.
En el caso de detectar la presencia de enfermedad profesional, la primera comunicación debe ser realizada al empleador, para que active el mecanismo de denuncia ante la aseguradora, o bien, directamente, a las vías de contacto proporcionadas por la ART.
Ante la divergencia en el diagnóstico, o sea, que la aseguradora rechaza la denuncia o deriva el caso a la obra social del damnificado, el/la trabajador puede elevar su caso ante la Comisión Médica de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo (SRT).