Mendoza, referencia internacional en materia de juicios por jurados
Juristas de todo el país y Estados Unidos participaron de las Jornadas Internacionales de Juicios por Jurados realizadas en la Universidad del Aconcagua. “Este camino de introducción gradual de la ciudadanía es el correcto, debemos seguir aprendiendo”, dijo el Ministro de la Corte, José Valerio.
La experiencia mendocina de la aplicación de la Ley 9.106 (Juicios por jurado) fue puesta en relieve durante los dos días en los que se extendieron las Jornadas Internacionales organizadas por el Instituto de Altos Estudios del Derecho, y que tuvieron lugar esta semana en la Universidad del Aconcagua.
Entre los exponentes invitados estuvieron, entre otros, el Ministro de la Suprema Corte de Justicia, José Valerio; el titular de la Unidad Fiscal de Homicidios y Violencia Institucional, Fernando Guzzo; el Vicepresidente de la Asociación Argentina de Juicios por Jurados, Andrés Harfuch; y los juristas norteamericanos Harry Dorfman y Peter Furst.
“Tal como es mandato constitucional, se debe entender el establecimiento de la participación ciudadana en todos los temas en los que se pueda, no sólo el penal. ¿Por qué no pensar que el pueblo resuelva en casos de familia, laborales o civiles? Soy de los que piensan que incluso las inconductas de los jueces debiera resolverlas un jurado popular y no la Corte”.
José Valerio, Ministro de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza
Igualmente, el Ministro Coordinador del Fuero Penal Colegiado de Mendoza destacó la importancia de la gradualidad: “este camino que iniciamos en los tipos penales más graves y que hoy estamos ampliando es gradual y está bien que así sea, porque los operadores de justicia nos estamos preparando y aprendiendo”.
Valerio fue uno de los impulsores de la Ley 9106, que se aprobó en octubre de 2018 y que estableció la realización de juicios por jurados para los tipos penales de homicidios agravados. Este año, una modificatoria enviada por el Ejecutivo amplió este tipo de debates, incorporando los casos de robo seguido de muerte, abuso sexual seguido de muerte y homicidio agravado por el uso de arma de fuego.
“Llegará el momento en el que los juicios por jurados deberán resolver casos de corrupción. Como operadores debemos estar preparados para ese momento. Las especiales condiciones de nuestro país nos obligan a impedir que la grieta se trasluzca en estos casos”, señaló respecto a continuar ampliando la competencia.
“Debemos entender a los juicios por jurados como la culminación de un proceso que ya se ha convertido en un fenómeno cultural, jurídico y político. Antes de la Ley 9.106, pensábamos que no podía ser tan distinto a lo que veníamos haciendo. Nos equivocamos y descubrimos que, en la praxis, debíamos convertir un expediente, en una teoría del caso; lo que fue todo un desafío”, comenzó señalando Guzzo, quien destacó el aprendizaje constante al que este sistema enfrenta a magistrados, funcionarios y empleados.
Para Guzzo, los juicios por jurados se convirtieron en una herramienta clave a la hora de repensar el ejercicio del derecho. “Aprendimos a depurar investigaciones, estamos reaprendiendo a litigar y a oralizar. Hoy promediamos 18 minutos de alegatos para hacerle llegar a un jurado un caso de cientos de fojas. Estamos aprendiendo a dialogar entre personas, más que entre abogados”.
Oralidad en el fuero civil, competencias del jurado, técnicas de litigación, tratamiento de evidencia digital, importancia de la teoría del caso, fueron otras de las temáticas de interés desarrolladas por los especialistas convocados durante los dos días.
Los norteamericanos Harry Dorfman y Peter Furst, expusieron sobre instrucciones al jurado y audiencia de voir dire (o selección de jurados), respectivamente, aportando la visión anglosajona de juicios por jurados.
Las Jornadas Internacionales de Juicios Por Jurados estuvieron organizadas por el Instituto de Altos Estudios del Derecho y contó con el auspicio de la Universidad del Aconcagua, la Asociación de Magistrados de Mendoza, el Ministerio Público Fiscal, el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP), el Instituto Técnico Superior Juan Vucetich y el Poder Judicial de Mendoza.