Una vez realizada la inscripción y las evaluaciones psico-sociales, el tiempo de espera depende de distintas variables, entre las que se encuentran las siguientes:
- La cantidad de familias inscriptas.
- La disponibilidad o disposición adoptiva[1] de los aspirantes.
- Las características y necesidades de las niñas, niños y adolescentes en situación de adoptabilidad.
[1] La disponibilidad o disposición adoptiva implica la construcción del proyecto de familia de los inscriptos, habiendo evaluado sus posibilidades y limitaciones al momento de ahijar, junto con las características y necesidades de las niñas, niños o adolescentes que se encuentran en situación de adoptabilidad. Los aspirantes deberán consignar si estarían en condiciones de adoptar a una niña, niño o adolescente o a un grupo de hermanos, de entre qué edades, determinando además sus posibilidades de adoptar a niñas, niños o adolescentes con discapacidad o con determinado estado de salud.
(Fuente: Ley Nacional N° 25.854 en su artículo 7 inciso b) y Decreto reglamentario N° 1328/09).